"Si tenéis un minuto, intentad resumir vuestra pasado, brevemente, y sentiros orgullosos.


Después, enfrentando el maldito folio en blanco, dibujad vuestro futuro, con pasión, con ganas de hacedlo mejor.


Será vuestro mundo, vuestro camino..."

domingo, 30 de noviembre de 2014

EMPEZAR CON UN FIN EN MENTE

"Administrar es hacer las cosas bien, 
liderar es hacer las cosas correctas"

Peter Drucker y Warren Bennis



Puedo decir que la semana última de Noviembre es una de esas de las que  no te dejan mucho hueco para pensar, no. Y es que cuando haces una ruta que pasa por  Lleida, Girona, Barcelona, Valencia y Palma, sin contar las dos jornadas que tocan de despacho en la central, una vez puesto el cuerpo en el hotel noche tras noche, tras largas y productivas jornadas no es nada más que para cena, ducha y cama. 

El resultado ha sido bastante positivo en general, y en particular el Jueves conocimos a los socios de una empresa que con mucha probabilidad nos brindará la oportunidad de realizar buenos negocios en el futuro, seguro que sí. No son exactamente el perfil que nos solemos encontrar en nuestro sector, pero tienen muy clara su política de empresa, y aun con un modelo de negocio muy distinto a lo que estamos acostumbrados a tocar y sufrir, están obteniendo ya muy buenos resultados en su zona de actuación.

Bueno, ya iremos estudiando como engranar nuestras empresas y cómo conseguir resultados conjuntos que mejoren la suman individual obtenida hasta el momento por separado. Lo que sí se denotaba en sus principios fue una gran efectividad tanto personal como de empresa, lo cual presagia un foco de aprendizaje y entendimiento con ellos que abrirá nuevas puertas a ambas empresas.

Por otro lado, este mismo sábado, tal y como había prometido a mi esposa, cogimos el coche y rematamos unos cuantos kilometros más (para que luego digan) y nos fuimos sin pereza a la capital del reino a que durante una hora y media nos deleitara Concha Velasco (por cierto, ayer era su cumple) con su obra "Olivia y Eugenio". La verdad, no hay nada mejor que conseguir que la mente se evada de todo, y en este caso, esta gran artista, lo logró.

La obra no os la contaré (tenéis que verla), pero sí que tras analizarla hoy a la mañana encontré una gran similitud con las personas que conocí en la empresa visitada el pasado Jueves. Sí, en ambos casos dirigían sus vidas con un claro "Empezar con un fin en mente".

Entonces me he dado cuenta que precisamente esto era lo que provocó mi seguridad de que estaba tratando con gente altamente efectiva. Y es que no se puede ser efectivo sin imponernos un objetivo, ni en la vida, ni en el trabajo.

Pero, ¿cómo elijo el camino que quiero seguir? ¿de qué forma trazo la línea hacia lo que quiero ser? Pues bien, hay una forma que no suele fallar, y me permito la licencia de indicaros cómo es posible analizar la mejor y más sincera manera de descubrir cómo nos gustaría ser.

El tema es sencillo y se trata de echarle un poco de imaginación:

"Debes verte en un funeral, llegando al mismo para dar el pésame y viendo a muchas personas conocidas pero que no te hacen caso al entrar y pasar por su lado. Como siempre, sueles acercarte a la zona donde descansa el cadáver y cuando te asomas te ves tú mismo. Vamos, que estás en tu funeral y tus allegados han ido a ofrecerte un último homenaje.

Entonces, coges una especie de tríptico que descansa en un atril cercano y puedes leer que tras el Rosario habrá cuatro oradores. El primer orador es alguien de tu familia cercana, por lo que te dibujarán de primera mano como familiar. El segundo es uno de tus amigos, por lo que tendrás la oportunidad de escuchar lo que has sido como persona. El tercer orador es un colega del trabajo y el cuarto es el párroco de la iglesia o comunidad a la que perteneces.

Ahora, te toca pensar profundamente en lo que te gustaría que cada uno de esos oradores dijera sobre ti y sobre tu vida. Qué tipo de espos@, padre o madre, clase de hijo, primo, amiga, compañero de trabajo, etc...

Con qué carácter quieres que te recuerden, qué logros te gustaría que resaltaran en público, cómo has influido en sus vidas, etc...

Díficil y profundo, ¿verdad? Pues de lo que se trata, una vez que hemos llevado una vida de proactividad, tal y como comentamos en la entrada del 5 de Octubre, toca darle sentido a nuestras vidas (en todas sus facetas: familia, amigos, trabajo, comunidad) con nuestros actos y para ello debemos de alcanzar por un momento nuestros valores más profundos y fundamentales, estableciendo un contacto breve con el sistema de guía interior que se encuentra en el corazón de nuestro círculo de influencia.

Dejando en el centro de nuestras vidas estos valores y siendo guía para nuestra actividad diaría tendremos de una manera clara y concisa (EMPEZAR CON UN FIN EN MENTE) la brújula que nos llevará hasta lo que queremos ser y cumpliremos nuestro sueño de serlo asegurando que todos los nuestros nos recordarán tal y como nosotros soñamos que nos recuerden.

Ahora debes orientarte a los valores que te hubiera gustado que los cuatro oradores remarcaran de tu vida.

En definitiva, recuerda que todo se crea dos veces, o sea que primero se visiona y después se construye (O así debería ser). Como se indica en la cita de la entrada de hoy de los Gurús Drucker and Bennis, debemos liderar nuestras vidas y no administrarlas. No debemos vivir bien con lo que nos marquen para nuestra vida otros sino vivir correctamente según nuestra visión y nuestras metas marcadas por nuestros sueños.

Llevándolo al terreno empresarial, no podemos caer en la tentación de trabajar por trabajar. Imaginemos a un grupo de jornaleros que deben de atravesar una selva. El productor/administrador ordena que vayan haciendo paso por la selva con sus herramientas y machetes desde el primer momento, sin detenerse. En cambio, el jefe que plantea el negocio desde el liderazgo trepa el árbol más alto y, supervisando la situación grita: "cambio de planes, selva equivocada".

Como padres, también a veces estamos atrapados en el paradigma de la administración, pensando en el control, las normas, la eficiencia sin orientarnos en el avance, el propósito de crecimiento y los sentimientos de familia.

Y qué decir de nuestras vidas personales, la ayuda al prójimo, los amigos... qué poco claro tenemos en este aspecto nuestros valores, nuestro fin...






Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 3 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: TENER UN FIN EN LA MENTE



Nota: Bueno, pues ahora toca re-escribir el guión de nuestras vidas, visionar y escribir nuestra misión personal para a partir de ahí llegar a construir nuestro yo, el que queremos que nuestros oradores realcen cuando nos vayamos...


sábado, 22 de noviembre de 2014

ATACANDO LAS POSICIONES DOMINANTES



"El monopolio es una cosa terrible, hasta que lo tienes"

Rupert Murdoch.
Ceo en News Corporation

Ya lo vaticinaba un amigo el sábado y desde el mismo lunes a la mañana tuve y no pocos comentarios en busca del colega que desde el mismo día primero de la semana quedó bautizado como el niño-adulto.

Y es que también es bastante singular que el único en no referirse al tema escrito durante la entrada pasada es el propio doliente y puede que se le haya pasado, el leerlo me refiero, ya que el comentario al respecto no faltaría, conociendo al susodicho.
Pues bien, sin darle más importancia, entre otras cosas porque no la tiene, me traslado a lo acontecido en mi semana, que es la vuestra y que merece la atención total ya que como dice aquél: "agua pasada no mueve molinos".

Y es que la tendencia sigue siendo de dinamismo, pedidos y sobre todo optimismo ante la generación de contratos en cantidad suficiente para evidenciar un gran primer trimestre del que será el mejor arranque del año de los últimos cuatro. Esta inercia nos ha permitido trabajar más centrados en el negocio y dejar atrás preocupaciones que motivaban tensiones innecesarias y que además, complicaban el quehacer diario con desgastes y roces derivados del nerviosismo general. Y de esta guisa han transcurrido las jornadas, sin ningún contratiempo a reseñar.

Ya acabando la semana, la laboral, y en la hora de las cañas, las de los viernes, ha salido el tema de una empresa del sector de un tamaño muy distinto al resto de competidores el cual, aprovechando sus pulmones es capaz de decidir los precios de su producto a la vez que éstos son los impuestos para el mercado. Es una posición dominante que ya se ha cobrado varias victimas en el camino y de momento, no parece que el final de la película esté cerca.

No he podido tras la charla, animada y de nivel, como siempre acordarme de los mercados en los que se está más cerca del monopolio que de la bendita "competencia perfecta". Y es que aunque parezca mentira, quedan segmentos, sectores o nichos, que de una manera encubierta, o no, toca lidiar con la injusticia de este extremo tan perjudicial para unos y tan ventajosos para otros.

Puede que la ventaja adquirida por la empresa en esta circunstancia sea buena para ella, ya que le hará ganar más dinero, pero el usuario aprovechará la situación para comprar más barato siempre y cuando la empresa no pueda aumentar los precios (usándolos como barrera de entrada) sacrificando eso sí la ausencia de gama o variedad.

Lo que es interesante, desde mi punto de vista es jugar la partida en el bando opuesto a estos gigantes con poder, evaluando sus puntos débiles e intentando cambiar en lo posible las reglas del juego. Como reza el título de la entrada, atacando las posiciones dominantes.

Toca pensar, y para ello nos pagan, ¿verdad? por lo que debemos aprovechar nuestra agilidad, asegurarse de no realizar maniobras peligrosas que pongan en peligro nuestra integridad empresarial, innovar, cambiar hábitos y cubrir necesidades inexploradas de los clientes, así como gestionar la proximidad y la extrema customización para posibilitar en la medida de lo posible el crecimiento de pymes a la vez que la creación de riqueza en nuestras zonas de actuación.

No suena fácil ni sencillo, pero sí que es un reto de gran calado el desplazar de su trono, o al menos intentarlo a tan enorme ejemplar. La tarea no es fácil cuando toca luchar sólo, desde una posición de tamaño y fuerza cuasi-ridícula respecto al competidor de referencia por lo que no vendría mal, aparte de imaginación y valentía temerosa algo de apoyo institucional que provocara una asociación aunando esfuerzos y permitiera la formación de una oposición relevante. Pero es utopía, no hay ganas ni mentalidad, por lo que este camino está y permanecerá sin asfaltar, o así lo estimo yo.



Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 4 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: ADECUACIÓN DE PRECIOS



Nota: Mucho camino que recorrer en estas lides y sobre todo barreras y piedras en el mismo no faltando peregrinos. Yo lo recorreré, atacando las posiciones dominante ¿y vos?

sábado, 15 de noviembre de 2014

NIÑO O ADULTO: TÚ ELIGES




"El mundo exige resultados.
 No le cuentes a otros tus dolores del parto. 
Muéstrales al niño."


Indira Gandhi. (1917-1984)


Muchas cosas han pasado durante la semana y aunque parecía que no sería posible concluir muchas de ellas, al final, paso a paso, gota a gota, se han ido concluyendo las tareas pendientes y las piezas del rompecabezas se han colocado de una manera bastante lógica; al menos eso creo yo.




Además, parece que poco a poco se van animando los clientes y se están tomando decisiones de inversión que vaticinan un buen final de año y sobre todo, un excelente inicio del próximo.

Por otro lado, en la parte aprendizaje, me ha tocado lidiar con una situación que me gustaría compartir con vosotros ya que al menos a mí me ha enseñado, y no poco.

El tema ocurrió este mismo jueves, a la hora de entrada a la tarde, justo en la puerta de la sala del café (bendita sala de confesiones, dicho sea de paso) me he cruzado con un compañero y el gesto que llevaba en la cara no me gustó, nada de nada.

La verdad, podría no haberle dado importancia, pero los que me conocéis sabéis que soy incapaz de no hacer un comentario a cada situación que se salga de lo estándar y esta vez no podía ser menos. Por tanto, le pregunté directamente si le había pasado algo a lo que el compañero sin vacilar (estaba deseando contarlo a alguien) me indicó la dirección de unas sillas al final de la sala y en su boca sonaron las palabras:

"por favor, siéntate y te cuento, esto no te lo vas a creer".

En resumen, estaba  fuera de sus casillas debido a que su jefe, sí, su jefe le había dejado sólo ante el peligro, a él, con un problema que tenía con un responsable de otro departamento. La verdad, no viene a cuento, pero era un tema bastante serio y yo tampoco daba crédito a que no le hubiera apoyado en este "affaire" tan peliagudo. Además, estaba en juego la reputación del departamento y al final, el responsable de este trabajador se vería involucrado en el asunto si éste no salía airoso del mismo. 

"Y encima, me ha dicho que quiere una solución antes de diez días ya que si no es así, tendrá que tomar medidas", comentaba con rabia. Incluso noté un velo de fluido a punto de derramarse en sus pupilas dilatadas.

No te prometo nada, le repetí varias veces, pero no dudes que si has recibido tan poco apoyo, y además sin motivo, tal como cuentas, ya me encargo yo de que sientas el arropo de tu jefe en estas situaciones en las que no se trata de unos u otros, sino que el interés general de la empresa debe primar sobre lo que él entienda cómo parte de tus tareas.

Y tras una breve charla, poco a poco se calmó. Eso sí, tengo que decir que me costó un cafelillo extra y este gasto no estaba en el plan semanal. Ya veremos cuando lo recupero.

Pasó el jueves sin más historia y hoy a la mañana he mandado llamar a mi despacho al jefe de departamento para que me explicara más sobre el asunto. La verdad, pensaba emitir una gran homilía de las que me caracterizan pero no, esta vez no he podido ni empezar, ya que antes de arrancar con la misma me han dado una lección que no por buena sino por magistral nunca olvidaré, y espero que ustedes tampoco.

Muy resumido os puede decir, que lo ocurrido formaba parte de un gran escarmiento a un "junior" que había dado ya tres desplantes a su maestro durante el último período del año (2 meses aproximadamente) y no había permitido que el jefe le ayudara en varias de las gestiones de importancia acaecidas en el tiempo referido. Además, con datos me ha demostrado que ha errado en las mismas, por su arrogancia y poca humildad a la hora de no pedir la ayuda que su responsable hubiera dispuesto en pro del bien común, tanto del departamento como de la empresa. En las palabras del susodicho, rezaba que ya no era un niño, y como adulto tenía derecho a decidir, gestionar y ejercer como tal. Que no necesitaba el continuo apoyo de su jefe y que le valorara al final del año y no con un seguimiento tan estresante y de manera tan continua.

Por lo mismo, el jefe le estaba esperando, y no sin falta de razón (una vez estudiado el asunto y viéndolo en perspectiva) le había dejado sólo ante el peligro para que viviera en sus carnes la necesidad de un apoyo, su apoyo, siempre y en cualquier circunstancia de la vida. Es decir, me comentaba, es muy probable que el tiempo nos haga dejar la niñez, sentirnos maduros, más seguros y capaces de afrontar tareas de una manera cada vez más autónoma, pero no debemos olvidar que siempre necesitamos sentirnos apoyados y protegidos. 


No he podido rematar la tarea y explicar al primero lo que el segundo me ha inculcado, pero estoy seguro que este fin de semana leerá esta entrada y el lunes sin necesidad de mediar palabra, sólo pagándome el café que me sacó indicará con este gesto que ha entendido el mensaje y por ende, aprendido la lección.




Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 4 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: LA OLLA EMBARAZADA



Nota: Nos hacemos mayores, adultos. Pero no debemos caer en la tentación de la total autonomía, ya que siempre nos hacen falta los nuestros. Padres, parejas, amigos, compañeros, todos tan necesarios como irreemplazables en muchos momentos de la vida. 

domingo, 9 de noviembre de 2014

REDUCIENDO COSTES SIN ELIMINAR INEFICIENCIAS

“Quien gestione una empresa basándose solo en cifras visibles, con el tiempo no tendrá ni empresa que gestionar ni cifras”

W. Edwards Deming (1900-1993)
Físico-EstadísticoConsultor 
y gurú de la calidad



Llega el momento de dejarnos llevar por la inercia del final de la temporada y debemos comenzar a planificar la siguiente.

¡Qué lujo!, parecemos el equipo de Fernando Alonso.

Bueno, en nuestro caso es más sencillo y tiene explicación, ya que si te encuentras en una empresa con un periodo de maduración de producto de 50 días y eso es exactamente lo que queda de año, si las matemáticas no fallan, otra cosa no será más clara que lo que vendas a partir de ahora será parte de la cifra de negocios del 2015; con total seguridad.


Por lo mismo, me toca preparar el equipo de la próxima temporada, en parte porque hay que adelantarse por lo que pueda venir, en parte porque para rematar el año están otras funciones en la empresa que se encargan y muy bien, dicho sea de paso, de gestionar las actividades operativas diarias.

Lo que no sabremos hasta rematar el ejercicio será como ha sido el resultado exacto, pero por los cierres parciales que nos han ido adelantando los "controllers" y el volumen de negocio vendido durante el año actual podemos decir que se mejorarán los anteriores de forma segura.

Aun así, siempre existen los conformistas, los inconformistas y los que ni sienten ni padecen, por lo que según sea el estilo de la persona que toque para decidir lo que se espera del negocio así serán las actuaciones o el camino a emprender en los próximos tiempos.

Precisamente, hoy, durante la hora en la que mi hija realiza natación todos los Sábados a la mañana, me he sentado al lado de un padre de un compañero de Carmen, que se llama Julián y preocupado me ha comentado que es muy posible que pierda el trabajo al final de este año.

La verdad, no me ha sorprendido en nada, ya que la empresa en la que trabaja lleva tres años consecutivos engullida en el ciclo recortes - destrucción de valor - reducción de ventas.

Y por lo que me contó la última vez, estaban en la fase de reducción de ventas por lo que una vez conocido el ciclo era muy sencillo pronosticar que le tocaba "recortes".

Y es que la película, aunque ya es antigua y siempre tiene el mismo final, se repite. 

Veamos, le dije,  a ver si te suena:

"Al principio, la empresa está recibiendo el impacto de la globalización y se ve sometida a una baja rentabilidad o lo que es peor, muestra pérdidas al final en su cuenta  de resultados. 

Entonces, comienza a estudiar una serie de datos y descubre que está perdiendo participación en el mercado y pregunta a las personas que en un principio deberían conocer los motivos. Normalmente se le echa la culpa a los precios y por ende, cómo la rentabilidad no es desproporcionada (en caso de que exista) se concluye que el problema está motivado por los altos costos. 

Volviendo a mirar a la famosa cuenta de PyG, se concluye que no hay capacidad de maniobra, pero tenemos que seguir compitiendo en el mercado, ¿verdad?

Bajemos los precios, no tenemos otra.

Pero pasando un tiempo, no vendemos más, pero sí que lo que llega lo hace con un margen achicado por nuestra decisión anterior.

Además, ahora empezamos a notar una angustiosa falta de liquidez y no nos queda otra que recurrir invariablemente a la reducción de costos. Ya está aquí, la fase recortes...

Una reducción de costos aplicada generalmente sin proyección estratégica, carente de método y sistema, que muchas veces no produce los resultados esperados en el corto plazo, y nunca logra objetivos ni en el mediano ni en el largo plazo."
  

Eso es, eso nos está pasando, me ha comentado Julián, preguntándome si conocía a alguien más de su empresa y me habían contado lo que les ocurría. Nada más lejos de la realidad, le he dicho, el tema es que es algo que se repite en pymes del mundo en la situación actual todos los días, y aunque la mayoría de las veces acaba en entierro la naturaleza humana provoca esta autodestrucción debido a que no estamos muy preparados para un pensamiento sistémico. 

Pero, si bajan los costes, mis jefes ganarán más, ¿no? Me cuestionó nuevamente mi doliente compañero. 

Pues no, le contesté de inmediato, e intento explicarte el motivo. La ecuación no es tan sencilla y entran muchos factores en juego, como por ejemplo, en el deseo de eliminar excesos, se eliminan no sólo la materia grasa, sino que se destruye también músculos y nervios de la organización. Con el objetivo de mostrar mejores resultados en el corto plazo se eliminan los planes de formación, con lo cual lo que no se gasta en capacitación se termina pagando con costos más elevados de producto, menores niveles de productividad y grandes defectos de calidad. Por otro lado las utilidades actuales se comen el futuro de la empresa al disminuir los niveles de respuesta y competitividad de un personal que no se adecua a las necesidades del mercado y al avance de la tecnología. Dirigir una empresa con conceptos tayloreanos ya entrados en el siglo XXI o tener personal con escasa o nula polivalencia impide todo tipo de capacidad de competir.

Y lo que es peor, la dirige a la MUERTE.

Ni que decir tienen que me hubiera gustado charlar más tiempo con este señor, pero tocaba bajar a vestuarios a darle el champú y la ropa de cambio a Carmen que ya se había pasado el tiempo de la clase de natación, la verdad que volando y la mañana debía seguir su curso. De todas formas, continuará...




Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 7 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


Nota: tema complejo donde los haya, sobre todo debido a que aún estando equivocados dejan a mucha gente en la calle y además no solucionan el problema. Bueno, esperemos que poco a poco esto no ocurra y todo tenga algo de más lógica.


sábado, 1 de noviembre de 2014

HABLEMOS DE COWORKING

"Llevadera es la labor cuando muchos comparten la fatiga"

Homero


Semana tranquila, vamos, de las que podemos denominar de transición la que acabamos de concluir.

Tampoco es malo que de vez en cuando nos lleguen unos días de relativa tranquilidad, que los niveles de estrés deben de equilibrarse con "tempos" de sosiego, ¿verdad?

A resaltar, una consulta que me llegó a través de un gran amigo que por casualidad me encontré en Madrid el Jueves, mientras dejaba a un compañero llegado de la central en la puerta de su hotel. Tiempo ha sin vernos y qué alegría me dio el poder departir unos minutos con este viejo conocido.

Y entre muchas cosas que hablamos en poco tiempo, me contaba que su nuevo negocio emprendido hace menos de dos años no estaba yendo tan bien como hubiera esperado. Además, debido a un plan más agresivo en un principio bien preparado, las oficinas se le habían quedado grandes. Es más, debido a que algunos de los servicios que necesitaba y había programado gestionarlos con personal de plantilla ahora, en algún caso por la imposibilidad de despido, en otros por criterios más o menos sentimentales, no podía minimizar los gastos que sus salarios ocasionaban.

La verdad, todo quedó en esta conversación y tras un café rápido nos despedimos, no sin antes citarnos antes de fin de año, ya que ambos teníamos muchos temas y sobre todo intereses comunes que compartir.





Y llegó el fin de semana, tan deseado como especial. Os cuento. Por primera vez desde que el grupo comenzó a casarse, y sobre todo a tener descendencia hemos decidido pasar un fin de semana largo (tres días y dos noches) en una casa común alejados del mundanal ruido. 

La verdad, lo hemos pasado fenomenal y durante la preparación de la cena del viernes, antes de comenzar la gran fiesta de Halloween (ya estábamos todos vestidos y habíamos dado una vuelta de "Trick or treat") observé cómo todos nos pusimos a colaborar en la citada preparación. Y encontré la respuesta al problema citado por mi amiguete.

Todos trabajamos en lo que mejor controlábamos, parecía como si no costara lo que hacíamos y sobre todo, sin saber realizar todas y cada una de las tareas por separado, el equipo era capaz de complementarse y posibilitaba la generación espectacular de tres jornadas completas sin falta alguna de todo lo que se necesita en un evento como el que estábamos disfrutando.

La palabra mágica me llenó de pronto mi pensamiento y se repetía en mi cabeza:

COWORKING, 
COWORKING,
COWORKING...

"Estábamos compartiendo casa, recursos, habilidades... optimizando y aprovechando nuestro mejor en aras del bien común."

Ni que decir tiene que mandé un mensaje instantáneo a mi colega y le prometí que sería mi protagonista en la "semanadeedusanchez" algún día (lo que no sabe es que sería hoy mismo).

Pero, ¿qué es el coworking? Bueno,  como inicio podremos decir que es una forma de trabajo que permite a profesionales independientes, emprendedores, y pymes de diferentes sectores, compartir un mismo espacio de trabajo, tanto físico como virtual, para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomenta proyectos conjuntos.
El coworking permite compartir oficina y equipamientos, y constituye una propuesta más elaborada que los de los denominados «cibercafés», entornos en los que también se cuenta con conexión a Internet.
También mejora al teletrabajo, ya que permite un mayor nivel de concentración, además de librar al profesional de compartir sala de estudio con perro, lavadora, llamadas a la puerta del vecino, cartero, etc...
Ni que decir tiene, que el trabajo cooperativo fomenta las relaciones estables entre profesionales de diferentes sectores que pueden desembocar en relaciones cliente-proveedor. En todo caso es frecuente que se genere un sentimiento de pertenencia a una comunidad, más allá de las vinculaciones efectivas, entre los trabajadores que frecuentan los espacios de coworking.
Los centros de trabajo cooperativo destinados principalmente a profesionales de Internet, diseñadores, programadores, arquitectos, fotógrafos, escritores, periodistas, etc., proporcionan, generalmente, un escritorio individual, acceso a internet y otros servicios.
El carácter flexible y práctico de este tipo de espacios, permite a muchos profesionales establecer un lugar permanente de trabajo, sin ataduras asociadas a contratos por servicios y suministros, dónde la permanencia mínima puede cambiarse con facilidad.
Ligado a este concepto de permanencia dentro de un espacio coworking, es importante hacer resaltar el factor geográfico, el cual juega un papel muy importante aunque no definitivo para la elección del espacio más apropiado. El ahorro de tiempo en transporte y el coste asociado, son beneficios que el coworking acerca a los usuarios de la zona en la que se encuentra localizado el propio espacio.
También me gustaría comentar que las incubadoras de empresas y los centros de negocios no parecen encajar en el modelo coworking, ya que a menudo no fomentan la vida social, en colaboración, ni las prácticas de gestión cercanas a las de una cooperativa, incluida una atención especial en la comunidad.
En definitiva, y como resumen el trabajo cooperativo ofrece una solución para el problema de aislamiento que supone para muchos trabajadores independientes, o incluso microempresas, la experiencia del trabajo en casa.


Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 2 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: COWORKING



Nota: sabiendo que es difícil comenzar nuevos retos por cuenta ajena, soluciones como el coworking permiten generar un arranque basado en la colaboración, y sobre todo en el reparto de gastos/inversiones tempranas; no se debe desaprovechar esta herramienta.

Gracias a la cuadrilla, por este gran fin de semana, inolvidable donde los haya y sobre todo cargado de grandes sentimientos y nuevamente gracias, de corazón por servirme de inspiración para la entrada de hoy. Os quiero...