"Si tenéis un minuto, intentad resumir vuestra pasado, brevemente, y sentiros orgullosos.


Después, enfrentando el maldito folio en blanco, dibujad vuestro futuro, con pasión, con ganas de hacedlo mejor.


Será vuestro mundo, vuestro camino..."

domingo, 26 de julio de 2015

RETRASA LA GRATIFICACIÓN Y LOGRARÁS EL ÉXITO

"La única disciplina que dura es la autodisciplina." 

Bum Phillips

Esta semana ha sido bastante larga y dura, como la vida misma. Sí, y es que cuando toca días de trabajo en oficina, combinados con algún que otro largo viaje es mucho más costoso en esta época del año (verano, verano) en la que sobre todo, a la vuelta de una jornada agotadora, llegas al hotel y no te encuentras con los típicos "viajantes" de otras épocas del año, no, sino que te topas con parejas, familias y grupos de amigos que están disfrutando de sus seguras merecidas vacaciones.

Pero todos tenemos nuestro tiempo de descanso, y ya nos tocará cuando nos llegue. Además, este sobre esfuerzo a realizar estos meses previos a las vacaciones personales tendrán una merecida recompensa y son una prueba más de lo necesario que es la disciplina para conseguir los resultados, que llegarán, diferidos, pero llegarán...

Ni que decir tiene que estas vivencias me hicieron recordar, la noche del miércoles al jueves, ya en el rato dedicado a repasar la jornada y planear en detalle el horario de lo que el día siguiente debería deparar (ya se encargaría la realidad de cambiarlo todo desde el momento de iniciar la jornada), una de las visitas acaecidas en uno de los talleres posibles a formar en la nueva tecnología que estamos ofreciendo.

Durante la visita comentada, en un inicio destinada a explicar a lo que nos dedicábamos y cómo podía enlazar en el proyecto la empresa de la que el interlocutor era el Director Comercial, hubo algo que me hizo recapacitar.

Cuando, entre otras cosas, le comencé a hablar del plan de negocio por años y empezaba a ver color al proyecto desde el segundo y sobre todo, el tercer ejercicio, el Director Comercial me paró en seco: "espera, chaval, ¿tú me ves a mí? ¿sabes que edad tengo?".- me dijo mirándome fijamente a los ojos. La verdad es que no pude estarme callado y aunque no tenía ni idea de la edad exacta le indiqué que se le veía cerca de la jubilación. Asintiendo me comentó en voz alta que tenía 64 años recién cumplidos, por lo que no era la persona aconsejable para recepcionar un proyecto que comenzaría a recoger algo de frutos en 2-3 años. Con las mismas, se levantó, salió de la oficina y me presentó al dueño del negocio, segunda generación, con una edad aproximada a los cuarenta años como la persona perfecta para escuchar, implementar y si fuera menester, compartir los éxitos del negocio que le contaba, y que aunque le gustaba, no entraba precisamente en sus planes a medio plazo.

Hasta aquí todo perfecto, de no ser porque la actitud de este profesional me hizo compararlo con otros muchos visitados en estos últimos tiempos y que teniendo una vida laboral por delante, un negocio y a veces, por desgracia un negocio venido a menos, siempre intentan encontrar recetas mágicas para cualquier tema que les surja en el camino de su importante, estresante y cargado de esfuerzos agobiante día a día.

Sólo atienden cuestiones que le reporten un beneficio en el ultra-corto plazo, no parándose a planear dónde, cómo y qué se puede plantar para que en el futuro (que seguro llegará) resulten agraciados por unos frutos generados por y gracias a la paciencia y el instinto de buscar y lograr el éxito en lo que creen.

No tienen la paciencia de escuchar, elegir a la persona que mejor encaje con el asunto, y la autodisciplina de luchar por temas bastante complejos y dolorosos de afrontar, que además generarán beneficios (si los generan) en un espacio de tiempo diferido difícil de calcular.

Es de orden citar a personas y empresarios que, desde el otro lado de la cancha expresan siempre interés, al menos estudian todas las propuestas que les parecen razonables y siempre tienen destellos de lo que son dando gracias a inicios basados en la perseverancia, creer en el proyecto y como no, cargados de una pizca de suerte que conecta el qué con el cúando.

Para concluir, esta misma mediodía, salía el tema en la sobremesa familiar, y todos coincidíamos en cuánto difícil es, por ejemplo, la tarea de estudiar. Y la dureza no se corresponde con la tarea, sino con la gran distancia temporal que se vislumbra desde que se ejerce la actividad hasta que llega la hora de recoger los beneficios. Es así, nos gustan las contraprestaciones rápidas, y lo peor, estamos educados en este sentido.

Por todo, cuando la tarea necesita esfuerzo prolongado, disciplina y superar grandes barreras combinado con unas recompensas cargadas de incerticumbre y además muy lejanas en el tiempo, decidimos no intentarlo. 

"Por favor, búscame algo que no cueste mucho esfuerzo 
y eso sí, 
que me genera beneficios "ya mismo".



Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 5 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: GRATIFICACIÓN DIFERIDA


Nota: siempre tenemos tentaciones para no intentarlo, para perder la paciencia, para parar. Pero hay que vencer las diferentes barreras que la educación, la sociedad y muchas veces nosotros mismos nos imponemos para hacer crecer nuestro pueblo, nuestras vidas...

domingo, 19 de julio de 2015

GRANDES RETOS CON PASOS HUMILDES

"Si quieres lograr lo que aún no has alcanzado, 
necesitas hacer lo que aún no has intentado"

Anónimo. 
Escrito en alguna pizarra, de alguna jornada, de algún congreso... 


Semana centrada entre horas de oficina y la capital, intentando culminar algún acuerdo cercano en alguna de las unidades de negocio, caminando en el curso de otras negociaciones más lentas, pero que llevan buen camino y cerrando alguna ruta que tras varios meses de gestión, tiempo, en definitiva dinero, nos llevan a un callejón sin salida y que por lo tanto, no merece continuar picando en...

Además, al final de la semana se ha abierto una nueva puerta que nos da la oportunidad de generar conocimiento y por qué no, una posible alianza con uno de los principales líderes del sector.

La verdad, nunca podria imaginar la cantidad de posibilidades que genera de crecimiento la situación planteada durante la generación de un negocio que debe de inventarse desde cero. No sólo hay que crear la compañía, sino incluso debes de generar ideas para construir el propio sector, ya que no existe. Difícil, pero hermoso y sobre todo, enriquecedor.

Y en todo este amasijo de sensaciones, dificultades y generación de conocimiento no faltan en el camino conversaciones entre socios fundadores, que sin dejar de ser una fuente de sabiduría cuando se funden en alguna conferencia informática determinada, no son tan enriquecedoras como las que concurren durante las comidas que las jornadas regalan en el desafío cuerpo a cuerpo (dos a dos). Parece que en grupo, todas las personas adoptamos un rol que maquilla nuestro yo real, y este velo que teatriza nuestros actos, nuestro verbo, queda ausente cuando toca hablar sólo con una persona que ayudada de un entorno diríamos amigable saca nuestro yo profundo sin retoques de ficción. Ay, Alvaro, que gran libro y cuánta sapiencia hay resumida en tu "Talking Manager" que tanto me marcó.

Y en agradable charla nos encontrabamos cuando un colega me decía que sentía que teníamos un 50% de posiblidades de triunfar. Nada más lejos de mi pensamiento, cuando le contra-pronostiqué un 95%. Y cuando su mirada mostraba sorpresa, no tuve más remedio que explicarle a través de algunos motivos internos (que rondaban por mi cabeza) por los que concluía tajantemente con mi cálculo.

Y es que en principio, si queremos obtener el éxito, debemos tener muy claro que el mismo SÍ ES POSIBLE. Esta máxima es una cuestión de Fe, de creer en tí mismo, de creer en la vida, en tus colegas...

Además, uno de los motivos que harán que lo consigas será que tras analizar con lo que cuentas para concluir el reto, para llegar a tu meta, detectas que SÍ HAY CON QUÉ. Miras a tu alrededor y diagnosticas que hay talento, hay equipo y que el equipo, vale, y vale mucho. Las posiblidades aumentan cuando a la fe le sumas unos recursos de nivel, o como diría un amigo: "de Champions".

Además, ahondando en la parte de recursos, puedes concluir en un LO VAMOS A LOGRAR, resaltando la primera persona del plural, ensalzando la parte de humildad que todo gran proyecto requiere. Sí, no hay grandes retos conseguidos, sin pasos y pequeñas hazañas pintadas de verdadera humildad. No estamos sólos, no somos UNO, lo conseguiremos entre todos. En este punto, siempre me gusta recordar que cuando falla alguien de otro departamento, unidad de negocio, etc... falla el equipo y fallamos nosotros. Sólo lo lograremos sintiéndonos una pequeña parte del proyecto, a la vez que importante, por supuesto, pero con la suficiente humildad de respetar y engrandecer los pasos, ayudas y aportaciones de cada uno de los componentes del sueño/proyecto, los cuales generan el continuo acercamiento hacia la meta, la nuestra, la de todos.

Y por último, no por ello menos importante, no debemos olvidar nuestro requerido esfuerzo individual que todo reto conlleva. El titular de este apartado sería DEPENDE DE MÍ, independientemente de las circunstancias, el entorno, los compañeros, los jefes; nosotros decidimos, apostamos, luchamos, seguimos o pivotamos... Somos nosotros mismos, los que tras el análisis de entorno, amenazas, oportunidades, debilidades y fortalezas dirijimos nuestro qué, nuestro cómo, nuestro cuándo y el por qué. Decidimos que nos lleven, a veces, o dirigimos nuestra vida, buscando, creando nuevas oportunidades, en definitiva generando  el guión de nuestras vidas sin actuar como máquinas en la peli que otros han escrito ¿para ellos?

Bueno, dejo un 5% para los imprevistos y por qué no, para un posible multimillonario premio de lotería, que interponiendose cual demonio en nuestro camino puede hacer de nuestra mente un instantaneo laberinto, que nos incline a comprar, por ejemplo, el aeropuerto de nuestra provincia cambiando nuestra meta por una muy diferente apuesta que nos haría necesitar, sin duda,  otro plan de negocio y lo más probable otros compañeros de viaje...




Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 4 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: NUNCA TE DES POR VENCIDO


Nota: No hay meta fácil cuando es ambiciosa, pero parar y mirar el camino recorrido con los tuyos te hace sentir bien, y con ganas de seguir. No lo dudes, tan importante es la meta como los pasos conseguidos hacia la misma, con humildad, siempre...



domingo, 12 de julio de 2015

LA INNOVACIÓN NO SE GENERA SÓLO EN EL LAB

“Si piensas que eres demasiado pequeño como para hacer una diferencia, 
es que no has dormido nunca con un mosquito en la habitación”. 

Proverbio Africano



La verdad es que conforme avanzan las semanas de este año en ascenso que nos ha tocado vivir, más me alegro de inhalar ese aire de esperanza que en todos los lugares, espero que pronto también hogares, se puede respirar. Más alegría, más esperanza y todo ello convertido incluso diría yo en una amabilidad general que, salvo excepciones de personas que viven totalmente en no-paz con ellas misma, se denota en las reuniones que van aconteciendo día tras día en nuestro documental de vida que a cada uno nos ha tocado vivir.







Me quedo con los amables, sin dudarlo, pero también les animo a cambiar la forma de afrontar sus trabajos, sus negocios, sus relaciones, de tal manera que hagan cada interacción diferente del ayer, de su siempre se hizo así.





Me gustaría despertar esta inquietud y permítanme indicarles que la bombilla se encendió el viernes, durante el almuerzo que cerraba la semana (tan a gusto nos encontrabamos los tertulianos que nos dieron la hora de la tardía merienda-cena, y más podría haber sido), cuando jj.milan nos contaba alguna aventura real vivida durante la inauguración del aeropuerto aquél, sito en la Ciudad Monarquica de cuyo nombre no quiero acordarme. Pasó de largo, tenía mucho y bueno que contar (y nosotros que escuchar), pero definió mi forma favorita de entender la innovación; desde el suelo, en el proceso, en el "Genba", palabra japonesa que significa "en el sitio de la acción". Nos contaba cómo cree que la innovación real, la que perdura, la que es sostenible y hace imparable la mejora de una organización es la provocada cómo raiz en el puesto de trabajo, porque permite medir la realidad de la mejora con la cercanía que nos premia el trabajar con los pies en la tierra, cerca de los problemas y en definitiva de las necesidades de los clientes.

Pero sí que el estar en la tierra no nos debe de impedir obsesionarnos con hacer cumplir nuestros sueños, por lo que toca desde nuestras organizaciones, sin necesidad de tener una bata blanca y un laboratorio, luchar por conseguir que nuestra forma de vida, nuestro modus operandi, en definitiva nuestra forma de procesar nuestra actividad diaria, sean distinta que ayer y creer que será distenta de mañana.

Ahora bien, enlazando con la gente amable que me he ido encontrando estos días de presentación de negocio, me gustaría comentar los patrones de comportamiento que he venido observando. Primero, se les aprecia un inicio de reuniones al uso, esperando una presentación que siga un patrón, unos tiempos que no maltraten el protocolo y por qué no decirlo, unas posturas que bien podrían estar grabadas en el pc y mostradas al visitante. Pero cuando se les introduce un nuevo sistema, una nueva posibilidad de negocio, una nueva posible fórmula de cambiar las reglas, sus ojos se abren al máximo, su postura de directivo rígido se relaja mostrando interés a la vez que confianza y sobre todo, muestran una luz en el semblante que denota ilusión.

Todas estas vivencias me hacen pensar, ya que estas interacciones han sido parte con propietarios, parte con trabajadores por cuenta ajena, que no sólo existen atisbos de escapar de la monotonía de la crisis y sus ajustes, sino que estamos viviendo una nueva época y se desprende una luz al final del túnel que puede posiblitar al emprendedor y en su caso, al denostado y dañado intra-emprendedor a poder reestaurar sus pequeñas pero valiosas batallas dentro de Su Empresa, que se lo ha ganado.

Cambia, prueba, genera, diferencia, estimula, motiva, Crece... Pero no esperes que te lo pasen desde el Lab, házlo en tu oficina, en tu trocito de fábrica, o si estás en el despacho, genera el ambiente para que los tuyos te presten su saber traduciéndolo en innovaciones y mejoras.




Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 2 minutos a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: ¿QUÉ ES INNOVACIÓN?


Nota: Interesante tertulia de Viernes institucionalizada, dirigida y catalizada por un gran maestro, y sobre todo AMIGO. Y entre maestros me encontré durante la jornada de apertura. Gracias por permitirme crecer con vosotros y espero que sea el inicio de otras muchas más, incorporando a los que no pudieron estar, por supuesto.

lunes, 6 de julio de 2015

TRATA BIEN AL QUE ENTRE EN TU NEGOCIO. NO ES TAN DIFÍCIL

"La amabilidad es un lenguaje 
que los sordos pueden escuchar 
y los ciegos pueden ver"

Mark Twain


Esta semana tocó dividir la misma entre centro y norte de nuestro país pasando dos días en toda la cornisa cantábrica. No es fácil estar presentando un nuevo negocio por allí donde pasas, pero la historia se complica si vas a empresas y negocios que no te conocen de otras cuestiones pasadas y toca no solo presentar el proyecto sino también conocerte mutuamente desde una situación inicial. 

Por ello, me centraré en el jueves, día en el que me tocaban tres reuniones con sendas empresas que no había tenido oportunidad de conocer en mi anterior etapa y que, aunque habían sido recomendadas por profesionales y amigos de confianza, siempre existe un mayor grado de incertidumbre que cuando se ha tenido una relación pasada ya directa con las mismas.

Bien, pues procediendo a la descripción de las diferentes situaciones acaecidas en la jornada, iniciaremos el paseo por orden, intentando ser conciso en cada una de las entrevistas derivadas de las reuniones.

Para aprovechar la jornada, dormí a 1500 metros de distancia de la ubicación de la primera empresa, en Gijón, por lo que a las 9:02 minutos estaba en la puerta intentando que alguien de los que pasaban cerca me saludara. Tras dos buenos días, sin respuesta, eso sí (pasaron dos personas a mi lado con la cabeza agachada no devolviendo el saludo), se acercó una persona que se presentó como el dueño. Yo le pregunté por el contacto que tenía, siendo su socio según él mismo me indicó, pero refiriéndome de una manera algo maleducada que no le había dicho nada de  mi visita y había tenido que salir a realizar un trabajo urgente sin posibilidad de conocer cuando lo terminaría. No se le veía con intención de llamar al socio, ni siquiera de atenderme, por lo que indicándome un "espera" corto y seco, se fue hacia el taller y se puso a dar ordenes a un par de operarios no de manera muy agradable, dicho sea de paso. Me esperé durante al menos 20 minutos sin que nadie me dirigiera ni siquiera una mirada; eso sí, aproveché para buscar en el móvil las diferentes acepciones de la palabra PACIENCIA. Tengo que confesar que fue lo único que se me ocurrió durante este tiempo tan de soledad que me había tocado vivir. Al final, el señor me indicó que pasara a una especie de recepción y me dijo que le contara. Yo sabía que estaba sentenciado, pero me lo confirmó cuando sin apenas escucharme me dijo que todo lo que le decía no tenía futuro, no creían en nada de esto y debía de seguir con sus tareas, que el día no estaba para muchas interrupciones. ¡¡¡ADIOS!!! Vaya inicio de jornada. Espero que no sea así todo el día, pensé en voz alta, porque el estreno no había sido tal y como se había soñado la noche anterior al preparar cada una de las visitas que esta jornada me esperaban.

Mientras me desplazaba a la segunda cita, una hora de distancia en coche en dirección sur, mi mente repetía que al menos, pasara lo que pasara, el día no podía ir a peor, y de esta manera, me presenté ante la centralita/recepción de una gran nave en la zona de Siero en la que un señor, con sonrisa en la boca, mientras le colgaba el auricular de la oreja me indicaba con dos dedos que por favor, le esperara un minuto. Yo, como siempre, durante estas esperas, me dedico a leer todo lo que la gente cuelga en sus paredes de salas de esperas, recepciones y similares, encontrándome esta vez, como en muchas ocasiones certificados de calidad y medioambiente, la política de calidad y una serie de frases típicas sobre "el cliente", "el trabajo bien hecho", y otros temas tipo eslóganes que por tener año y nombre no conocido por mi parte en cada frase me imaginé que fueran originarios de algún concurso promovido internamente por la empresa. Una vez pasado el ansiado minuto, me invitaron a presentar el motivo de mi visita y, aunque no estaba la persona que había quedado conmigo, había tenido que salir a arreglar un tema urgente (inmediatamente pensé de forma retorcida que lo mismo había salido junto a mi anterior no-posible-entrevistado), pero había dejado orden de que me atendieran, y así lo hicieron. Tengo que decir, y así se lo hice saber por teléfono al titular de mi visita planificada, y jefe de la persona que me atendió, que en este caso me trataron a las mil maravillas, tomando nota de aquello que le interesaba, enseñándome y explicándome su proceso de fabricación e instalaciones, y confirmando que era posible una cierta sinergía en un futuro entre las dos empresas.

Y salí hacia mi última parada, antes de continuar hasta casa, esta vez pensando que lo bueno de tener un traspiés a la primera, es que en cuanto tienes una actividad normal y cercana, ésta te parece encantandora debida al efecto comparación...

Para concluir, tras una parada a comer y también hacer que el reloj marcara la hora de la última reunión a la tarde, me presenté en las instalaciones de la última empresa que tocaba, esta vez localizada en Tordesillas. Me atendió una señora en recepción muy amablemente y en un suspiro me aposentó en una bonita sala de reuniones, no pasando un minuto cuando el Gerente entró y se presentó en la estancia.

Nuevamente salí de la reunión con las expectativas totalmente cumplidas. Me escuchó atentamente, preguntando las dudas que le iban surgiendo. Además, como es ya usuario de uno de nuestros productos no tuvo ningún reparo en contarme, con pelos y señales, toda su historia (desde el nacimiento hasta la fecha) con este tipo de activos. Lo bueno, lo malo, lo positivo, las pegas. Para mí, esta entrevista fue de las mas productivas en mucho tiempo, ya que de una forma nada defensiva, este señor me dio una Master Class de experiencia real de producto que tiene una gran valor dentro de la fase de conocimiento de mercado y experiencia de cliente, sintiendo que la jornada en su conjunto, había merecido la pena.

Al salir, contento y agradeciendo su tiempo y excelentes explicaciones lo entendí todo; en la pared central de la entrada a la recepción colgaba el siguiente grabado que me permití el lujo de fotografiar y que comparto a continuación.



Para muestra, un botón y me permito sugeriros que dediquéis 1 minuto a ver el siguiente vídeo que evidencia todo lo escrito y si no cae en saco roto podréis usarlo como ejemplo varias veces al día desde el momento que lo veáis.


El vídeo de la semana: CASO DE PERSUASIÓN.


Nota: En definitiva, todo el mundo merece ser tratado bien, y ya que vamos a dedicar unos minutos al que entre por la puerta de nuestra vida debemos de intentar que se vaya con el mejor sabor de boca tras la interacción que han tenido con nosotros. Todo al final tiene su beneficio, y si no, al menos habremos alegrado al prójimo una parte de su día.